Deseando que den las 9 de la mañana

Buenos días. Aunque muchos de vosotros lo sabéis, pongo en antecedentes, por si acaso, que soy de los que va al estanco/s habitual, prácticamente a diario. El motivo, o mejor dicho, los motivos son varios.
Para mí ir uno u otro estanco cada día, en función de los puros y habanos que quiero comprar, ya que no todos están en el mismo, es posiblemente la rutina más maravillosa del día. Los cigarros que compro al día, 3 ó 4, o la lata minipuritos, los fumo en el día o en dos días....puede haber alguno que, por circunstancias, lo guarde más días. Creo que posiblemente, ya lo haya dicho. Para mí la cava de un estanco es, hoy por hoy, y como dice una canción..."el patio de mi recreo". Allí, o frente al humidor/cava, del estanco de la Plazuela San Miguel, (mi favorito), miro detenidamente y con los ojos de niño en una tienda de juguetes, todos lo cigarros que tienen, su marca, su aspecto, su precio....y tengo la sensación de que no hay ninguno, que no me vaya a gustar. He dicho que tengo un límite diario, (normalmente), de 15€ para gastar en puros y habanos, o minipuritos La Paz cuando toca, y normalmente antes de ir, tengo bastante claro lo que voy a comprar. A veces me traigo cosas nuevas porque tengo la inquietud de probar, todos los puros y habanos que pueda. El caso es que a las 9 de la mañana, abre el estanco de La Plazuela San Miguel y también el de la calle Premio Real. Ni que decir tiene que a las 8:45, como si de un peregrino lleno de fé se tratase, me encamino casi a diario a ver lo que hay, (aunque lo se casi de memoria), y a ver lo que traigo, (que suelo tener claro casi siempre), de uno o a veces de los dos estancos.
Se me ocurrió abrir este hilo, porque suelo madrugar normalmente, y cuento los mismos, prácticamente, que faltan hasta la hora en que puedo salir de casa para ir a lo que denominó, "mis santuarios". No sé si esto es fruto, en parte, de que es algo nuevo y fascinante para mí, y si algún día se calmará esta inquietud e ilusión tan grande, ni sé si hay más compañeros a los que les pasa algo similar, pero cada amanecer, es la primera cosa que tengo en la cabeza. El resto del día, tengo otras maravillosas rutinas, como tomar algo antes de comer en el bar de enfrente de casa, y compartir charla con los camareros y dueños, y con los vecinos y amigos del barrio, o acercarme de tarde al barrio de La Arena, lleno de locales de todo tipo y con cierto bullicio, por el que me gusta dar una vuelta y curiosear algo.
Bueno, os dejo que son las 8:05, y tengo que ducharme y vestirme para que, a las 8:45, esté preparado para salir de casa con mucha más ilusión que dinero, cosa que por otro lado, lo último no me preocupa.

Un saludo cordial y buen día